Ingredientes:
- 2 kilos de tomates para salsa
- Albahaca fresca (cantidad al gusto)
Instrucciones:
Paso 1: Lava bien los tomates, quítales los tallos y desecha los que estén dañados. Corta los tomates por la mitad o en trozos, según su tamaño.
Paso 2: Presiona suavemente cada mitad de tomate para extraer las semillas y el agua de vegetación en un frasco de vidrio.
Paso 3: Transfiere los tomates a una cacerola de fondo grueso y cocina a fuego medio durante unos 30 minutos, girándolos con frecuencia para evitar que se peguen. Mientras tanto, esteriliza los frascos de vidrio hirviéndolos en agua durante unos diez minutos.
Paso 4: Pasados los 30 minutos, coloca los tomates en un pasapurés, eligiendo una malla pequeña para un puré fino o una malla mediana para un puré más rústico.
Paso 5: Deberías obtener un puré suave y no demasiado líquido. Si está ácido, agrega una pizca de bicarbonato para mejorar el sabor y vuelve a cocinar unos minutos.
Paso 6: Una vez listos, seca los frascos esterilizados. Coloca una hoja de albahaca en el fondo de cada frasco y rellénalos con el puré, dejando 2 cm de espacio en la parte superior.
Paso 7: Coloca los frascos en una olla separándolos con un paño para evitar roturas. Cubre completamente con agua y cocina durante 40 minutos desde que el agua empiece a hervir.
Paso 8: Apaga el fuego y deja que los frascos se enfríen en la olla. Verifica que los tapones estén sellados correctamente.
Paso 9: Tu puré de tomate casero está listo para guardar en la despensa o para usar inmediatamente. Puedes etiquetar los frascos con la fecha de preparación para mantener un registro.
Consejos:
- Puedes aromatizar el puré con albahaca fresca, cebolla o ajo en rodajas finas durante la cocción.
- Evita agregar sal o aceite, ya que pueden reducir la vida útil del puré y aumentar el riesgo de desarrollo bacteriano.
- Para obtener una consistencia más densa, cocina el puré durante 30 minutos adicionales después de pasar por el pasapurés antes de envasarlo